Epistolario

MENSAJE XVII

Che! Soy yo. Eh… Nada llamaba para decirte que tengo muy presente la conversación de anoche. La he tenido todo el día. Me he dado cuenta de que la vida es una broma. A pesar de todo… Todo está en saber llegar a tiempo a destiempo. Yo crecí en una isla, crecí con mi abuela. Después crecí en una isla con mi familia. Y en esa isla
quiero seguir viviendo. Espero que me perdones algún día. Espero que puedas perdonarme. Espero que guardes nuestra historia y que la respetes.
Nos vemos en el paraíso. Si está.
Un beso y un abrazo.
Bye, adiós.
Mensaje dejado en el contestador automático de Lorena
Barbería antes de su muerte. (Febrero de 2001)